La novela de Heinlein está disponible en una excelente versión en audiolibro (en inglés)
Acabo de terminar otra novela de ciencia ficción clásica, de
Robert A Heinlein: “Have space suit -will travel” (Consigue un traje
espacial: viajarás. 1958). Se trata de una obra del género de ciencia
ficción llamado “juvenil”, dirigido a principalmente a adolescentes. En ella,
el protagonista, Kip Russel, habita en un típico pueblo de la América de los 50,
mientras piensa como financiarse los estudios universitarios. Pero su gran
obsesión es viajar a la luna. Para ello, no duda en participar en un concurso
que sortea un viaje a nuestro satélite; y aunque no con sigue el primer premio,
al menos logra un traje especial de segunda mano.
Kip dedica imaginación y esfuerzo para poner el traje en
perfectas condiciones, aunque vaya a usarlo sólo en el patio trasero de su
casa. En esta tarea, el autor hace gala de sus conocimientos técnicos, ya que
trabajó en un laboratorio con trajes presurizados. Pero claro, justo entonces
comienza la gran aventura de Kip: por una casualidad, una nave tripulada por
malvados alienígenas “cara gusanos” le secuestran, junto a una inteligente y
rebelde niña (Peeewee), y a un ejemplar de otra raza alienígena mucho más
benigna (Mother thing). A partir de entonces, lucharán por escapar y sobrevivir
a los peligros del espacio exterior, incluyendo a la Alianza de las Tres
Galaxias. En esta aventura, la clave para sobrevivir será la colaboración entre los "buenos", la inteligencia y habilidad frente a la fuerza bruta, la sinceridad y la perseverancia (aunque un poco de buena suerte también ayuda, claro...)
Aunque la novela esté dirigida a un público joven, resulta
muy entretenida y llena de humor. El mensaje dirigido a los jóvenes es que el esfuerzo y la honradez
al final se premian, algo muy noble pero por desgracia quizás ya no tan cierto
en estos tiempos revueltos…
Una novela menor de Heinlein, pero que engancha como casi
todas las suyas. Especialmente en la versión de audiolibro, que es la que he
utilizado, ya que evoca de manera deliciosa la época de los 50, con la ilusión
del reciente nacimiento de la carrera espacial.
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