sábado, 27 de noviembre de 2010

Estos muertos están muy vivos....

No será el calentamiento global, ni la guerra nuclear, ni un gran meteorito, ni una invasión extraterrestre, ni tan sólo la aparición de un canal global de televisión dedicado a Julio Iglesias. No. Quienes va a provocar tarde o temprano la aniquilación de la especie humana serán los zombies. O al menos de eso parece estar convencido Max Brooks (hijo de Mel Brooks) en ZOMBI: Guía de Supervivencia (Editorial Berenice, 2008).

Se trata de una exhaustiva guía que analiza todos los aspectos relativos a la prevención y protección contra ataques de zombies, de todas las magnitudes y en todos los entornos posibles. Deshace mitos y leyendas erróneas sobre el tema, transmitidas en el cine, la literatura o la tradición oral, para establecer con precisión las verdaderas características de los zombis, como se crean, como atacan, la forma de afrontarlos y eliminarlos, y los posibles escenarios en los que la humanidad se encontrará en caso de que algún brote se descontrole. Concluye con una exposición de todos los casos conocidos a lo largo de la historia (y la prehistoria) con la época, el lugar, las características y extensión, y el grado de veracidad y de documentación de que disponemos en los distintos casos, así como los habituales esfuerzos oficiales por ocultar lo máximo posible la información.

Y todo esto es planteado bajo la más absoluta seriedad, como si se tratara de una guía de supervivencia ante un terremoto o un incendio devastador. Nos encontramos ante un texto delirante, divertido y en mi opinión, una crítica feroz al concepto paranoico occidental y en particular estadounidense sobre la seguridad, que lleva a la conocida afición al armamento y a la autoprotección extrema.

Es muy recomendable, aunque en mi opinión es excesivamente largo, y no siempre consigue mantener la atención a lo largo de las 300 páginas de que se compone el libro. Supongo que el autor intentó precisamente parodiar de la forma más contundente posible los miedos citados, mostrando paso a paso qué ha de hacer un ciudadano normal para convertirse en un superhéroe armado hasta los dientes eliminador sin piedad de cuanto muerto viviente se le ponga por delante.

Mucho cuidadito con permitir que se os acerquen desconocidos de color grisáceo con la mirada extraviada y un caminar torpe...

jueves, 25 de noviembre de 2010

No pares, sigue sigue...


Viajeros al treeeenn...si se atreven, claro...

No, el título de esta entrada no continúa la interesante serie que mi amiga Teresa introdujo en la anterior. Se refiere más bien a una trepidante y espectacular película de acción, "Imparable", (unstoppable). Se trata de una amena cinta, que se ajusta a todos los tópicos clásicos del género: una serie de circunstancias y errores conducen a una catástrofe ¿inevitable?. Durante la pelicula, disfrutaremos de los buenos (inteligentes, valientes, aunque algo cínicos y pasados de rosca), de los malos (mezquinos tipos corporativos con corbata, muy lerdos todos ellos), pero sobre todo, lo pasaremos bien con el gran protagonista de la historia: un espectacular, impresionante y enorme tren descontrolado...

Los americanos son los maestros indiscutibles del cine de acción. Si en una película europea, o incluso, en la realidad, se necesita que intervenga la policía, lo esperable es ver a un triste coche patrulla o dos como mucho en una persecución. Pues no, los americanos saben que eso no es suficiente: ponen a trescientos o cuatrocientos coches de policía en marcha, sabiendo que con la alta tasa de mortalidad que tienen, al final llegaran unos pocos a atrapar al malo. Eso si, coches de policía persiguiendo trenes puede resultar excesivo hasta para los americanos...

A pesar de las licencias "poéticas", la película se hace bastante creíble. El entorno industrial y ferroviario está muy logrado, consiguiendo la extraordinaria fotografía que resulte por momentos atractivo. Los planos pecan a veces de ser demasiado rápidos, siguiendo la moda actual en este tipo de películas, pero aun así resultan muy impactantes, y por momentos, realmente espectaculares.

El director, Tony Scott (hermano de Ridley Scott), está especializado en este tipo de cine, como ya pudimos comprobar con "Marea roja" "Déjà vu", "Enemigo público", etc. En esta película, cuenta con el solvente y muy conocido Denzel Washington, el guaperas Chris Pine, y la atractiva Rosario Dawson. La película me recuerda en ocasiones a "Twister", y tiene un interesante precedente en "runaway train", película más inquietante y original, rodada en 1985. Aquella película contaba con estupendos actores como Jon Voight, una joven Rebecca de Mornay, y el debut del malvado Danny Trejo, que hace poco ha demostrado su arte como destripador en "Machete". Al parecer, el bueno del Trejo entró en el rodaje para otra cosa, y cuando le vieron el careto, no se lo pensaron dos veces para ofrecerle el papel de malo. El actor previo a su lado parecía la Madre Teresa...

En definitiva, un estupendo entretenimiento sin mayores pretensiones. Eso si, la próxima vez que tenga que viajar en tren me lo pensaré dos veces...






viernes, 19 de noviembre de 2010

Hablemos de sexo

Lo prohibido, lo oculto, lo que sigue provocando risitas nerviosas, lo que todos negamos y muchos anhelamos, de lo que hay que saber aunque no tengas ni idea, de lo que hay que presumir aunque puede que nunca te haya gustado, de lo que tienes que renegar aunque te guste mucho…

Si te declaras asiduo practicante te catalogan de obseso, si niegas practicarlo de reprimida. ¡Cuantas visiones distintas de una misma cosa!.

Mirando atrás recuerdo el momento exacto de mi despertar sexual y recuerdo exactamente qué lo provoco, bueno más bien quién: Sandokan, el tigre de Malasia, el personaje creado por Emilio Salgari y que interpretó en la serie de televisión el fascinante Kabir Bedi. Estaréis conmigo en que elegí un ejemplar de macho espectacular: Ojos hipnóticos, labios carnosos, físico imponente y un personaje fuerte, intrépido y aventurero. ¡No me perdía un episodio y era verlo en pantalla y sentirme desfallecer!.

Ahora mirando la fotografía, aunque me sigue pareciendo igual de guapo, me acabo de dar cuenta de que mi mapa erótico-afectivo-sexual masculino estaba condicionado por la religión, ya que la mayoría de imágenes de Jesucristo que existen lo representan como un hombre de pelo largo, con barba y ojos claros. ¡Que gracia, placer y pecado unidos!.

Inicie mi formación sexual literaria con “El amante de lady Chatterley”, del escritor D.H. Lawrence, novela que supuso un gran escándalo para las mentes pacatas de su época (http://www.primeravistalibros.com/fichaLibro.jsp?idLibro=332). "El Decamerón”, “Los cuentos de Canterbury”, “Historia de O”… Por cierto en “Conflicto social y conducta desviada”, una de las asignaturas de mi carrera, obtuve un sobresaliente debido, sobre todo, a la parte de conducta desviada en la que se estudiaban perversiones y practicas sexuales varias de las que ya estaba ampliamente informada dada mi “malsana” y “nunca suficientemente satisfecha” (je, je) curiosidad por esos temas.

Lo bueno que tiene la literatura es que te orienta a la vez que estimula tu imaginación y tú misma decides la cara y el cuerpo que les pones a los personajes, algo que en el cine ya te viene impuesto. Además el sexo en el cine está dominado por una visión falocéntrica: Un macho fuerte, que no puede controlar su deseo y que necesita poseer a la hembra con urgencia. Un ejemplo que ilustra lo que es un “buen polvo” cinematográfico es LA ESCENA con mayúsculas de “El cartero siempre llama dos veces”, no la versión en blanco y negro de 1946 con una sensual Lana Turner, mucho más erótica, sino la película dirigida por Bob Rafelson donde un salvaje Jack Nicholson protagoniza un encuentro sexual con la exuberante Jessica Lange con un realismo tal que incluso se dijo que el sexo había sido real (extremo que ambos negaron). Lo cierto es que te ponía a cien… ¿o no?.

Por sugerente y efectiva me quedo con la escena del beso entre Burt Lancaster y Deborah Kerr en una playa desierta, en “De aquí a la eternidad” película dirigida por Fred Zinnemann. Aunque hoy puede parecer mojigata, escandalizó a la puritana sociedad americana de los años cincuenta, no tanto por el beso en si mismo sino porque lo daba una esposa adultera que no ocultaba su necesidad de atención y sexo.

Más reciente y explicito el polvo en la escalera entre “VIGORRR” Mortensen y María Bello en “Una historia de violencia”, donde el primero hace un alarde de movimiento de caderas, que cuantos quisieran para sí, al tiempo que nos deleita con un primer plano de su culo (algo poco usual ya que los culos que se suelen ver en pantalla son los femeninos).

En “Monster´s ball”, una de mis películas favoritas, tiene lugar otra escena de sexo memorable e intensa, aunque teñida de dolor, rabia y desesperación, casi una catarsis, entre Hank (Billy Bob Thornton), un ultraconservador y racista empleado del corredor de la muerte, intransigente y agresivo, y Leticia (Halle Berry) una mujer de color que acaba de perder a su marido en la silla eléctrica. Aquí el sexo es brutal, violento y a la vez hermoso. Una liberación, una curación de las almas a través del desahogo de los cuerpos. Francamente es inolvidable como toda la película en sí. Y que decir de Billy Bob salvo que Angelina Jolie tiene una suerte increíble en cuestión de hombres: Primero se cepilló a éste y ahora a Brad Pitt.

Pero sin duda nadie ha sabido escenificar el deseo sexual femenino como Jane Campion en “El piano”. La relación entre Ada McGrath (Holly Hunter) y George Baines (Harvey Keitel) se inicia sin palabras, a través de la música, de una manera suave y contenida. Cada encuentro supone un nuevo peldaño en el descubrimiento del erotismo. A medida que ambos se van liberando de la rigidez de sus ropas, van dado rienda suelta a un deseo que vibra desde la primera mirada, que se enciente con el roce más leve y que termina desbordándose cambiando toda su existencia.
Es un erotismo electrizante que te cala hondo y que despierta en el espectador un deseo sexual reprimido, el ansia de experimentar lo mismo que estás viendo.

Y para terminar el animal por excelencia, la encarnación misma de la sexualidad, la personificación del macho alfa: Marlon Brando, en camiseta, llamando a gritos a su mujer: “Estelaaaa” en la fantástica “Un tranvía llamado deseo” de Elia Kazan….






… ¡Simplemente un tranvia arrollador!.

sábado, 13 de noviembre de 2010

Hasta siempre Mister Berlanga


En Madrid, su pueblo y el mío, se me ha muerto como del rayo García Berlanga, con quién tanto reía...

La crítica más inteligente basada en el humor. Maestro en colar goles a una censura tan inculta y pacata que no podía ver lo que tenía delante. Se va y nos quedamos todos un poco más huérfanos.

¿Y no era acaso el mejor defensor de esta España de charanga y pandereta...












...cerrado y sacristía, devota de Frascuelo y de María, de espíritu burlón y de alma quieta...













Defensor de las buenas costumbres de la gente de bien. Es imprescindible un oficio estable para mantener a la familia y pagar el piso...















...sin abandonar la caridad cristiana, para que por una noche sentemos un pobre a nuestra mesa...
















...todo ello con respeto a nuestra aristocracia rural y sus refinadas costumbres...















Tú que decías que no pensabas morirte nunca... como mentor nuestro que eres, nos debes una explicación y esa explicación que nos debes nos la tienes que pagar.

Nos has dejado para irte con Buñuel y Valle Inclán, Machado, Delibes, López Vazquez, Manuel Alexandre y tantos otros...que nos estáis dejando muy solos aquí abajo y hay poco reemplazo. Espero que te reciban angelitas de tacón alto, de zapatos de raso y aguja.

Como tenemos que hablar de muchas cosas, compañero del alma compañero, hoy volveré a ver Plácido. Y ahora más que nunca, prometo no perderme el ciclo de 8 madrid TV (besos Reichel, mi programadora favorita)

martes, 9 de noviembre de 2010

La guerra de los clones


La calvita Asajj Ventress no parará de dar caña a los Jedis despistados que se crucen en su camino...


Recientemente he visto la película de animacion "The Clone Wars", y la primera temporada de la miniserie del mismo nombre. Al parecer, se prevé que pueda haber hasta 5 temporadas. Ya se han producido las tres primeras.

La película (que funciona como primer episodio largo), y la serie están ambientadas en el periodo de tres años, entre "La Guerra de las Galaxias Episodio II: ataque de los clones", y"La Guerra de las Galaxias Episodio III: La venganza de los Sith".

La serie fue recibida con buenas críticas, alabando su perfección técnica y el guión. Efectivamente, estoy de acuerdo, se trata de una obra complementaria a la doble trilogía de La Guerra de las Galaxias, que va a encantar a todo buen friki amante del mundo Star Wars. Los episodios son cortos, muy ágiles (se quitan un poco el royo místico de las películas), y también ganan en humor respecto al original.

Durante los episodios, nos encontramos con personajes muy conocidos como Anakin Skywalker, Yoda, Obi wan Kenoby. Amidala, etc, por parte del lado bueno de la fuerza; y con los más interesantes y siniestros seres del lado oscuro: los clásicos como el Conde Dooku, Palpatine/Darth Sidious, y la atractiva pero temible Asajj Ventress. Además aparecen personajes no conocidos previamente; a destacar la divertida Padawan Ashoka Tano, una indisciplinada aprendiz que pondrá en más de un apuro a los a veces excesivamente rígidos y ceremoniosos maestros Jedi. En la película, hay escenas especialmente divertidas y tiernas, ya que sale un personaje espectacular: ¡el hijo de Jaba el Hutt! El pequeño mocoso (nunca mejor dicho) ya apunta maneras de bicho mostrenco y asqueroso, pero a la vez inspira cariño...

Durante la serie se desarrollan más personajes como los soldados clónicos, un tanto desdibujados en las películas. Aquí comprobamos su valor militar y personal, y las diferencias entre ellos, a pesar de compartir el mismo genoma. La serie utiliza recursos propios del cine bélico, y aunque trata de mantener un tono relativamente amable y humorístico (supongo que para poder alcanzar al público infantil), algunos capítulos resultan bastante violentos. Al fin y al cabo, es la crónica de una terrible guerra librada a lo largo de una Galaxia muy, muy lejana...




Papaaa, en el cole me llaman monstruo....

viernes, 5 de noviembre de 2010

PEÑARANDA DE DUERO (BURGOS)

De Toledo a Burgos: Larga travesía por una llanura inmensa, infinita, hiriente. Casi deseas que algún accidente geográfico rompa las líneas rectas. Carreteras rectas; pueblos rectos paralelos al río. Abuelos encorvados. Pocos niños.

Nuestro destino es Peñaranda de Duero (“ciudad de la peña y el río”) enclavada en lo alto de un cerro, en el margen derecho del río Arandilla y a 18 Km. de Aranda de Duero. En un principio formó parte del Alfoz de Clunia (http://es.wikipedia.org/wiki/Alfoz_de_Clunia). Más tarde fue considerada aldea de San Esteban de Gormaz; posteriormente perteneció a la provincia de Segovia hasta que, en el siglo XIX, se integró definitivamente en la provincia de Burgos.
Atravesamos una de las puertas de la muralla y accedemos a la hermosa Plaza Mayor, de estilo medieval, que aglutina los principales atractivos de esta pequeña aunque sorprendente villa. En la que antiguamente se conocía como “la casa grande” se ubica la “Posada Ducal”, donde me ha alojado estos días. Habitaciones espaciosas, decoración cuidada y cama con un colchón muy cómodo que invita al descanso. Hasta el segundo día no conocemos al Sr. Oscar, el propietario, amable, hablador y un poco fulero. A diferencia de otras Posadas Reales de Castilla y León en las que he estado, más coquetas y silenciosas (“La Casa de la Sal” en Candelario y “Los Vetones” en Fresnadillo de Sayago), en la Posada Ducal no prima el recogimiento y el encanto lo rompe el ansia del negocio. Tiene un bullicioso bar en la entrada y el comedor, grande y desangelado, es el mismo tanto para huéspedes como para los que no lo son, lo que nos ocasiona no pocas molestias.

Preside la plaza el impresionante Palacio de Avellaneda, encargado por Don Francisco de Zúñiga y Avellaneda, tercer Conde de Miranda, considerado como una de las mejores obras renacentistas de la comarca. Desde el patio, subiendo por su majestuosa escalera, se accede a la planta superior donde te asombran y sorprenden sus ricos y curiosos artesonados.

La ex-colegiata de Santa Ana no pude visitarla por incompatibilidad de horarios ya que solo tiene programadas visitas a las 11,00 de la mañana o a las 16,00 h. de la tarde. El rollo gótico, símbolo de justicia, fue trasladado a este lugar en 1959.

Curiosa la Botica Ximeno, la más antigua de España que se encuentra en funcionamiento pero en cuyo interior no te dejan hacer fotografías.

En lo alto de la peña que da nombre al pueblo se yergue el castillo, fortificación defensiva de origen romano, desde el cual se obtienen unas preciosas vistas de Peñaranda y de la extensa llanura que la circunda.

El segundo día visitamos la Colonia Clunia Sulpicia (http://es.wikipedia.org/wiki/Clunia) en Peñalba de Castro, un recorrido que te habla a cada paso de la grandeza del imperio romano. Sorprende la estructura y modernidad de sus ciudades, su organización, su permanencia. Asombrosos sus hermosos mosaicos. Estaban restaurando el teatro, construido estratégicamente aprovechando los accidentes del terreno en el que se erige.

Tras la visita a Clunia nos dirigimos a Santo Domingo de Silos, lugar al que deseaba ir hacía tiempo y que me defrauda enormemente. La Iglesia de San Sebastian, barroco tardío y transición al neoclásico, es austera en el adorno y desmesurada en las proporciones. La belleza del claustro románico es incuestionable, salta a la vista, pero la imposibilidad de recorrerlo por tu cuenta, pausadamente, te impide su disfrute. Te obligan a participar en una visita guiada que, dada la parsimonia del guía, su poco entusiasmo, su tono cansino al hablar, hace que te aburras y pierdas el interés por un lugar tan hermoso. Incluso el poema que Gerardo Diego dedicó al ciprés de Silos, recitado por este señor resultaba insulso y monótono:

"Enhiesto surtidor de sombra y sueño
que acongojas el cielo con tu lanza.
Chorro que a las estrellas casi alcanza
devanado a sí mismo en loco empeño.
Mástil de soledad, prodigio isleño,
flecha de fe, saeta de esperanza.
Hoy llegó a ti, riberas del Arlanza,
peregrina al azar, mi alma sin dueño.
Cuando te vi. señero, dulce, firme,
qué ansiedades sentí de diluirme
y ascender como tú, vuelto en cristales,
como tú, negra torre de arduos filos,
ejemplo de delirios verticales,
mudo ciprés en el fervor de Silos."

A las 19,00 son las “vísperas” y la iglesia está llena de gente que, como nosotros, quiere escuchar a los monjes entonando esos cantos que tan famosos los han hecho. Tengo la sensación de que algo se ha perdido puesto que una ceremonia que debería ser íntima y privada se ha convertido en una especie de circo. Ellos rezan, se arrodillan, se levantan mientras los asistentes los sometemos a un escrutinio minucioso y persistente. ¡Me siento como una intrusa!.

Cuando volvemos de Silos nos encontramos un paraje impresionante: El desfiladero de la Yecla. Puedes recorrerlo a pie cruzando una estrecha pasarela. Hay tramos en los que una persona solo puede pasar agachando la cabeza y ondulando el cuerpo. Mi claustrofobia se hace presente. Cada vez siento más angustia en el estomago y algo de vértigo. La pasarela continua descendiendo hasta el río y mi sensación de ahogo aumenta. ¡No soy capaz de completar el recorrido!. Los numerosos buitres que coronan lo más alto, nos acechan y observan, lejanos y cercanos a la vez. En el silencio reinante oímos el batir de sus alas. Deben vernos como algo delicioso que añadir a su dieta porque ¡cada vez hay más!.

El tercer día viajamos a Burgos. Dedicamos toda la mañana a visitar su catedral. Me impresiona tanto que no encuentro palabras para definirla. ¡Casi, casi me gusta más que la de Toledo!. Aquí os dejo unas fotos de sus maravillosas cúpulas que hablan por si solas de la belleza de este lugar.

Durante la visita nos reímos mucho porque un grupo de abuelo segovianos “muy caninos” (muy malos en manchego) atacan a otro grupo de Guadalajara: “Estos no son de los nuestros” se chiva uno a su guía que, inmediatamente, exige a los extraños que salgan de la capilla que en ese momento visitan.

Cuando salimos, nos recibe un sol maravilloso que invita a sentarte en alguna de las numerosas terrazas que hay en la plaza Mayor. Pedimos la bebida y nos traen dos Coca-Colas “góticas” (la botella de 33 cl., más larga y espigada que la voluptuosa botella clásica rubensiana). Me hace mucha gracia la ocurrencia que, debo admitir, no es mía sino de mi compañero de viaje. En vez de comida seria decidimos tapear y saboreamos la deliciosa morcilla de Burgos y chorizo de orza. Recuperadas las fuerzas nos pateamos la ciudad que cuenta con numerosas plazas y un casco antiguo totalmente peatonalizado, lo que nos permite recorrer, tranquilamente, las calles y tiendas del centro. ¡Me gusta Burgos!.

El cuarto día teníamos previsto viajar a Burgo de Osma, en Soria, pero el Sr. Oscar nos recomienda que nos acerquemos antes a Calatañazor “donde Almanzor perdió su tambor”. Antes de llegar a esta preciosa localidad nos recibe un sabinar centenario cubierto de rojos y amarillos otoñales. Un viento frío y persistente te azota en lo alto del castillo y te acompaña por las calles de trazado medieval. El pueblo está practicante tomado por un equipo de rodaje (creemos que pueden ser los de la serie “Águila roja”), lo que nos recuerda que este pequeño rincón escondido ha sido elegido en numerosas ocasiones por ilustres cineastas como escenario de sus películas (en Calatañazor Orson Welles rodó algunas escenas de su película "Campanadas a medianoche").

En Burgo de Osma volvemos a encontrar calles paralelas al río (el trazado lineal de los pueblos de esta zona me sorprende, acostumbrada a los círculos concéntricos, alrededor de la iglesia, que distingue a los pueblos de la Mancha). Muchos hoteles, restaurantes, casas rurales, tiendas… El dulce típico de la zona es la “torta del beato”, (“no comerla es un pecado” reza su eslogan) pero como está rellena de cabello de ángel, que no me gusta, me decanto por las “catedralitas”, unas deliciosas pasta (mantequilla de Soria, harina, huevos y azúcar) que el amble tendero de “Vega Ucero” (C/ mayor, 28) nos da a probar antes de comprarlas. ¡Un señor muy atento y agradable!. La catedral, principal monumento de esta localidad, resulta tan grande como destartalada. Constituye una rara amalgama de estilos que descansa, triste, bajo una gruesa capa de polvo. ¡Una pena lo abandonada que aparece!.

jueves, 4 de noviembre de 2010

The Town

Entiendo que en España, dado nuestro nulo conocimiento de otros idiomas (no tanto por falta de capacidad, sino de interés y motivación), traduzcan los títulos de las películas. Ahora bien, de eso a cambiarlos a su antojo hay un abismo, sobre todo porque se empeñan en desvelar en los mismos de que va la peli, como si fuéramos tontos. Así “The town” ha pasado a llamarse “Ciudad DE LADRONES”.
Es una película muy completa: Los atracos, epicentro de la historia, son violentos y angustiosos. Las huidas rápidas, convulsas y cardiacas. El sexo poco, pero efectivo. La historia de amor, el transfondo, compleja y creíble. Los ladrones malos pero con conciencia. Los policías buenos, pero muy agresivos… ¡Me ha sorprendido Ben Affleck!.
Las redadas del FBI, las persecuciones y los atracos, están rodados como si fueran documentales lo que confiere a las escenas un gran realismo. Mantiene el ritmo-pausa-ritmo en su justa cadencia, por lo que en ningún momento pierdes el interés.
Es la primera película en la que Ben Affleck parece un actor y no una momia de rostro pétreo. Jeremy Renner (protagonista de “En tierra hostil”) interpreta a una mala bestia con principios. Rebecca Hall (lo único bueno que recuerdo de la inefable y olvidable “Vicky, Cristina, Barcelona”) muy acertada en su papel. ¡Y que decir del agente del FBI encarnado por Jon Hamm!. Este imponente sujeto ya me encandiló en la magnifica serie televisiva “Mad Men”, una de las mejores que he visto. ¡Está para dejarte arrestar y que te esté interrogando TOOOODA LA NOCHE!.