Juego de tronos (Game of thrones) es una entretenida serie de la HBO, con una temática de fantasía medieval. Está basada en la primera novela de una serie, “A song of ice and fire”, escrita por George R. R. Martin, publicada en 1996. Esta serie de libros ha resultado ser un bestseller mundial.
http://en.wikipedia.org/wiki/George_R._R._Martin
La excelente adaptación televisiva ha sido supervisada directamente por el escritor, y ha cosechado varios premios. La serie narra las luchas entre varias familias nobles, especialmente dos (Los Stark y los Lannister), por hacerse con el control de un gran reino que abarca siete territorios. Las tensiones internas van creciendo, a la vez que se ciñen sobre el atribulado reino dos amenazas de invasión, una por el sur por parte de terribles y exóticos guerreros a caballo, y otra aun peor por el norte. Esta última promete ser muy divertida, ya que consiste de zombies recién desenterrados después de pasar un milenio bajo el hielo…
Aunque contiene los elementos típicos del género de fantasía: dragones, mazmorras, brujería, espadones y demás, que no me atraen demasiado, la serie no abusa de ellos. La trama principal resulta creíble e interesante, ya que se inspira libremente en la historia de los reinos medievales, en las intrigas palaciegas, batallas, conspiraciones, etc. La serie no se corta a la hora de mostrar escenas violentas, sexo, humor negro y salvaje, y en general, todo lo peor de la raza humana y de otras especies más o menos identificables.
Mención especial merece el gran trabajo realizado para recrear escenarios fantásticos pero creíbles, sin abusar de los efectos digitales. Vestuario, música, castillos y paisajes son un espectáculo en si mismos. Los preciosos exteriores han sido rodados en Irlanda del Norte, Escocia, Malta, Croacia e Islandia. No en vano HBO ha invertido 50-60 millones de dólares sólo en la primera temporada, y parece que aun más en la segunda, en la que se representa una batalla que promete ser la caña del reino…
En definitiva, aunque normalmente no sigo este género, y apenas conozco “El Señor de los Anillos” y poco más, creo que merece la pena ver esta serie, y disfrutar con los malos malísimos y cabronazos, traidores, cortesanos intrigantes, valientes nobles, doncellas en apuros, princesas luchadoras, magos, buscavidas, soldados, prostitutas y demás fauna que puebla la imaginación medieval, y no digamos nada de esos magníficos zombis nórdicos recién descongelados…
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