viernes, 3 de junio de 2011

2036 OMENA-G

Mi amigo Ángel, empeñado en que descubriera la magia del teatro, me invitó a ver en el Rojas “2036 OMENA-G”, de Joglars, y pese a mi reticencia inicial me he encontrado con un espectáculo que me ha dejado sin palabras.

Son 90 minutos ininterrumpidos durante los cuales recibes tal cantidad de información, de estímulos visuales y sonoros que te quedas casi sin aliento. ¡Nunca había asistido a un espectáculo tan denso!.

Boadella es un maestro de la escenografía. Ha conseguido con su dominio de la imagen y el sonido insuflar al teatro un ritmo que crees imposible si no es en el cine. Nada más empezar, solo con la proyección sucesiva del año en pantalla y los movimientos controlados de los actores, percibes el paso del tiempo. ¡Es impresionante como algo en apariencia tan simple, consigue algo tan complicado!.

Actores, como Loles León, periodistas, como Juan Luis Cebrian, políticos como Pilar Rahola, Leire Pajín, Pujol y muchos más, son incluidos en esta obra que, conmemorando el 50 aniversario de la compañía, conmemora la historia de España y de todos aquellos que, con mayor o menor acierto y en mayor o menor medida, han contribuido a que ésta sea la que ha sido.

Homenajes al cine como la escena del baile entre Burt Lancaster y Claudia Cardinale, perteneciente a la película “El gatopardo” de Luchino Visconti, basada en la novela de Giuseppe Tomasi di Lampedusa. La banda sonora de “Lo que el viento se llevó” cuando aparecen en pantalla los barracones en los que han sido confinados los ancianos. Increíble la coreografía de los abuelos, arrastrando las sillas al ritmo de “El lago de los cisnes”. ¡Es de las escenas más originales que he visto en mi vida!.

Una sátira dura y cruel sobre la vejez. Una critica mordaz sobre el trato que la sociedad dispensa a los mayores. Una defensa clara del derecho a una muerte digna, y soterrada de la eutanasia (al menos así lo entendí yo). Una denuncia sobre la desposesión de la dignidad y una reivindicación del derecho a decidir sobre tu vida, o lo que queda de ella.

A mi me impacto mucho la parte trágica, de hecho reí poco.

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