miércoles, 31 de mayo de 2017

37 dias


Sus vais hacerr pupitarr pekadoress


28 de junio de 1914. Comienza un tranquilo verano en la confiada Europa de principios de siglo. El Archiduque Francisco Fernando, heredero del  trono del  Impero Austrohúngaro, visita la capital bosnia, Sarajevo. No era el momento más adecuado para ello, teniendo en cuenta la gran tensión política existente. Una conspiración preparada por nacionalistas bosnios con el apoyo de Serbia le estaba esperando. A las 10 y 10 se produjo un primer ataque con bomba, que falló. Tras cancelar su agenda, Francisco Fernando se dirige al hospital para visitar a los heridos del atentado, cuando el conductor comete un error. Da marcha atrás para retomar el camino correcto, y se le para el coche. Para mayor inri, uno de los conspiradores, Gavrilo Princip, que estaba en una tienda cercana, observa la situación y la aprovecha, matando de un tiro a los herederos del trono.



Este hecho tan rocambolesco arranca la cuenta atrás para la I Guerra Mudial. Durante 37 días, la situación se irá complicando. Diplomáticos y políticos partidarios de la paz se enfrentarán a los que piensan que una guerra rápida, limpia y moderna les permitirá ajustar viejas cuentas y conseguir un mayor trozo del pastel de las colonias.  

Estos movimientos diplomáticos están bien recreados en la interesante serie británica “37 dias”.


Narra, desde la perspectiva inglesa, los frenéticos contactos entre las grandes potencias europeas, especialmente Rusia, Alemania, Austria, Francia e Inglaterra. Una mezcla letal de militarismo y  nacionalismo con incompetencia y estupidez, más las limitaciones en las comunicaciones de la época, van a lastrar los esfuerzos negociadores, acercando día a día una guerra que aterrorizaba sólo a los conocedores del poder destructivo de las armas modernas.

Probablemente los hechos no son muy exactos, algunos personajes parecen algo falsos, y se nota cierto sesgo favorable a los británicos, pero en todo caso, merece la pena ver este brillante drama político, por el esmero en la recreación de la época, buenas interpretaciones, y por la trascendencia de los dramáticos hechos que narra.





domingo, 7 de mayo de 2017

LA GRANJA DE SAN ILDEFONSO (Segovia)

Para mostrar lo preciosa que está La Granja en primavera no hacen falta palabras:








lunes, 17 de abril de 2017

Drácula, de Bram Stoker



A ver quién pasa una noche aquí....


Bram Stoker nació en Dublin en 1847. Enfermo de pequeño, afortunadamente se recuperó y acabó estudiando matemáticas. Interesado en las artes y en el teatro, se trasladó a Londres para gestionar el Lyceum Theather, de la compañía de Sir Henry Irving. Miembro de la alta sociedad, viajero, conoció a personajes como Oscar Wilde, Arthur Conan Doyle, e incluso a algún presidente de EE.UU.

Stoker comenzó a publicar novelas, entre ellas algunas de terror. Gracias a su amistad con el escritor húngaro Armin Vambery, se interesó por el el folklore y la mitología de la Europa del este. A partir de ese momento investigó a fondo las historias sobre vampiros. Bram Stoker murió en Londres en 1912.

https://en.wikipedia.org/wiki/Dracula

La novela Drácula está escrita en el género epistolar, tan de moda en el Sg. XIX. Con habilidad, el autor utiliza diarios personales, diarios de a bordo, noticias de prensa, e incluso transcripciones de grabaciones en fonógrafo, la tecnología punta de la época,  para componer una trama llena de acción y emoción que no se resiente por esta fórmula un tanto arbitraria.

La famosísima novela comienza con el largo viaje de Jonathan Haker, un “solicitor” (especie de procurador) dedicado a negocios inmobiliarios, para reunirse con un extraño y solitario cliente en Transilvania: el Conde Drácula. Según se acerca al siniestro castillo del conde, su inquietud va en aumento. Varios acontecimientos sugieren que el conde no es quizás el más normal de los vecinos del barrio. Una vez dentro del castillo, el bueno de Haker comprueba que es un prisionero en el ambiente más gótico que se pueda imaginar. A partir de ahí comenzará una aventura llena de terror y peligro para él y para todos sus amigos y familiares.

Aunque Jonathan Haker es un personaje fundamental en la novela, hay otros dos que han trascendido mucho más: su mujer, la  atractiva, interesante e inteligente Mina Murray, que dará una lección de valor a un grupo de caballeros victorianos que tratan de apartarla del peligro con bastante poco éxito; y sobre todo, el excéntrico sabio holandés Abraham Van Helsing, con su inglés un tanto extraño, su mezcla de conocimientos científicos y mágicos, y su personalidad carismática que llena todas las escenas en las que aparece.


Aunque ya existían novelas y narraciones previas sobre vampiros, como “El vampiro” de John Polidori (1819), escrita tras el famoso encuentro en Suiza en el año sin verano del que surgiría también el Frankenstein de Mary Shelly, el Drácula de Bram Stoker establece los rasgos clásicos que definen a todo vampiro elegante y siniestro que se precie. La novela parece escrita para el cine, con un ritmo trepidante, y un final de infarto que se adelanta a Hollywood en muchas décadas. La novela, llena de aventura, algo de humor, un toque de erotismo y diversión continua, resiste perfectamente la lectura después de decenas de adaptaciones al cine, teatro, cómic, etc. Al parecer, existen más de 200 películas de Drácula, incluyendo los dos grandes clásicos, el Drácula de Coppola (1992), y Brácula de Chiquito de la Calzada (1997). A destacar también la estupenda Mina Murray en el cómic “La liga de los hombres extraordinarios”, de Alan Moore.


Y aquí Teresa nos habla más sobre vampiros...

http://elfrikismoilustrado.blogspot.com.es/2009/11/una-de-vampiros-en-aquellas-miticas.html


Drácula, con Mina no te metas Pekadorrrrr....






sábado, 8 de abril de 2017

Toledo siempre es una buena opción (IV)

Si son de los que prefieren susto (je, je) a muerte, el Cerro del es su lugar:
Por las excavaciones arqueológicas:

Por las impresionantes vistas del Tajo...

del Parador...
del Castillo de San Servando...

del imponente Alcázar...


del puente sobre el Arroyo de la Degollada...

de toda la ciudad...

por su belleza...

Toledo siempre es una buena opción.



domingo, 2 de abril de 2017

Doña Clara (Aquarius)


Venid hermosos que aquí os espero....

Recife, Brasil. Clara, una atractiva e interesante mujer de 65 años, ex crítica musical, vive tranquilamente en su bonito apartamento del edificio Aquarius, en frente de la playa. En él convivió con su marido, crió a sus hijos, y en él guarda una impresionante colección de música en vinilo y los recuerdos de su vida. Ahora podrá disfrutar de su jubilación entre la animada playa, su familia y sus aficiones…hasta que la especulación inmobiliaria llama a sus puertas. Resistiendo en el último piso sin vender del pequeño bloque de apartamentos, comenzará una lucha sin cuartel entre el desalmado promotor y una mujer luchadora que quizás no esté tan sola y desvalida como podría parecer….

Con este interesante argumento arranca la película brasileña Doña Clara (Aquarius), del director Kleber Mendonça Filho, director y guionista de Recife. Yo tuve ocasión de conocer esta ciudad costera del estado de Pernambuco en el año 2004, y tenía interés de verlo en cine, además de que la película ha cosechado muy buenas críticas y varios premios.


La cinta cuenta con la excelente interpretación de Sonia Braga (El beso de la mujer araña, Un lugar llamado Milagro, El principiante, etc). Encarna a la perfección a un personaje complejo, a una mujer golpeada por algunos acontecimientos dramáticos, capaz de enfrentarse a una dura situación con ironía, paciencia, buena educación, clase, determinación y mucha mala leche. La tensión irá escalando y la película, aunque larga, la dosifica adecuadamente y resulta muy amena.

Su largo metraje le permite incluir historias familiares y de amistad, con varios hilos argumentales. Partiendo de un ya lejano 1980, nos muestra la evolución de la sociedad, la cultura, la presión del desarrollismo salvaje, la solidaridad y los conflictos personales, la sexualidad, etc., todo ello sostenido por estupendos actores y una música muy bien elegida, que ayudan a transmitir la emoción en muchos momentos intensos.

El planteamiento de la película es doble, ya que a la vez que narra una historia concreta, simboliza claramente los cambios que se están produciendo en la actualidad. El bonito edificio Aquarius, resto de otra época y otra forma de vida, con su precioso jardín, sus dimensiones humanas y su diseño elegante se está quedando sólo entre un mar de rascacielos. Una situación que no resulta ajena en nuestras propias costas. Los mismos personajes siniestros, la presión del dinero de oscura procedencia, la política y la corrupción ya los vimos en la excelente serie española “Crematorio” (o en la prensa diaria, vaya). La película ha tenido gran repercusión en Brasil y ha sido interpretada en clave política.


¿Cuánto tiempo resistirá Doña Clara en su  defensa numantina frente la especulación y el tiempo….?


miércoles, 22 de marzo de 2017

Pueblos más bonitos de España: Villanueva de los Infantes

¿Que aún no saben por qué Villanueva de los Infantes (Ciudad Real) ha entrado en el selecto club de los Pueblos Más Bonitos de España?

Pues pasen y vean....




















¿A que esperan para visitarlo...?

jueves, 9 de marzo de 2017

Westworld: robots, vaqueros y la singularidad


Veniii al parque, pekadoreees de la praderarrr...



La empresa americana HBO (Home Box Office) inauguró la actual época de esplendor de las series de televisión, con la imprescindible “Los soprano, 1999-2007”.  Para rematar la tarea, tres años después presentó “The wire, 2002-2008”, quizás la mejor serie de TV de todos los tiempos. También ha producido otras grandes series, como “A dos metros bajo tierra, 2001-2005), Sexo en Nueva York (1998-2004), la impresionante Band of Brothers (lo mejor en el género bélico), Roma, Tremé (genial su música) y una de mis favoritas, Deadwood, que por desgracia canceló por su excesivo coste.

Todas ellas y algunas más hicieron de HBO la reina indiscutible de la producción de calidad. Sin embargo, en estos años la competencia ha aumentado, con la entrada de otras productoras por cable o incluso de canales en abierto en la lucha por las mejores series. La HBO necesitaba un nuevo pelotazo, y lo consiguió con “Juego de Tronos”. Pero al estar terminando esta espectacular serie, se necesitaban más éxitos. Uno de ellos es “True detective”…y el otro gran éxito reciente, “Westworld”.


Westworld está basada en la película clásica de ciencia ficción “Almas de metal” (1973), escrita y curiosamente también dirigida por Michael Crichton, el maestro del techno-thriller. En ella, un Yul Brynner más duro que nunca aterrorizaba a los visitantes de un parque temático dedicado al oeste, a la edad media y al mundo romano. Es el clásico tema de la revuelta de los robots, que no están dispuestos a tolerar más los abusos y las chorradas de los humanos.



La serie actual se queda sólo en el mundo del oeste, que recrea de una manera magnífica. Creada por Jonathan Nolan (El prestigio, el caballero oscuro, Interestellar) y Lisa Roy, aporta todos los elementos que configuran una gran historia de ciencia ficción, subgnénero robots, añadiendo además el atractivo del ambiente del oeste, con sus impresionantes paisajes y con todos los personajes típicos, que ya vimos en Deadwood. La serie añade más cualidades: una producción muy cuidada, unos actores estupendos (los más famosos como Ed Harris y Anthony Hopkins perfectamente acompañados por otros menos conocidos). A destacar Evan Rachel Wood, como Dolores, una sufrida robot, habitante de Westworld, cuya vida va a empezar a cambiar.... Y finalmente, la fotografía y una  música muy adecuada redondean cada episodio. Impresionante la pianola tocando Back to black de Amy Winehouse, y preciosa la analogía entre la máquina y el robot en esta escena que refleja todos los temas de la serie:


Westworld aborda la creación de  inteligencia artificial, el nacimiento de la consciencia de las máquinas en la llamada “singularidad”, que podría cambiar la historia y la evolución. El nacimiento de la consciencia robótica pondrá en cuestión las motivaciones y la ética de los humanos, que no saldrán muy bien paradas en esta historia. Estupendas críticas para una gran serie que medita sobre los cambios tecnológicos y sociales de nuestra época a la vez que nos hace disfrutar de la narración. Robots y vaqueros, para que queremos más…